Foto: Reuters
Abro los ojos, después de tantear la mesita de noche buscando las gafas ¡bendito miope! Logro conectar la radio, algo raro pasa. Pongo la televisión, lo primero que sale es Canal Sur, y en el faldón de “Última Hora” algo que nunca quisiera oír “Manolo Preciado ha muerto esta noche a causa de un ataque al corazón” literal.
No me
lo puedo creer, salto de la cama, enciendo el ordenador ¡Tarda mucho! Quiero leer
noticias, solo espero que sea un fallo de nombre. Con el tiempo voy asimilándolo,
me voy a Google Chrome, cinco pestañas, una por cada diario deportivo. Es
cierto, Manolo ha muerto. Ayer se confirmó su fichaje por el Villarreal, mañana
iba a ser presentado ¡no puede ser! “Un tipo con un gran corazón, que ha muerto
de un exceso de él” alcanzo a oír a un contertulio de Espejo Público.
Una
vida dura, primero falleció su esposa en 2002, a causa de un cáncer de piel.
Tan solo dos años después, su hijo menor a la cortísima edad de 15 años, por un
accidente de ciclomotor, falleció también. El fallecimiento de esposa le vino
durante un partido cuando dirigía la pretemporada del equipo de su tierra, el
Racing de Santander, poco después llegó Piterman y al ser un hombre integro,
decidió abandonar el club, porque no le dejaban trabajar libremente.
La peor
llamada de su vida. Cuando era entrenador del Real Murcia le comunican otra
malísima noticia, una madrugada de julio, su hijo con un ciclomotor se
estrellaba contra una pared y perdía la vida, Raúl, a los 15 años era uno de
los principales apoyos de su padre desde el fallecimiento de Puri, su primera
mujer y madre de sus hijos. Tan solo tres meses después, y a causa de los malos
resultados, era destituido como técnico del Real Murcia.
No todo
se queda ahí, no hace muchos meses, cuando todavía era entrenador del Sporting
falleció su padre, con 84 años, había sido atropellado en El Astillero, su
localidad natal. Manolo Preciado, padre y su hermano decidieron ayudar a un
coche que se había quedado sin batería en la Urbanización La Cantábrica, donde
residía. Se disponía a empujar el coche, y el padre del técnico resbaló, con lo
que el coche le pasó por encima.
Como
destacaba El Periódico en su edición
digital el 23 de Abril de 2011, Manolo Preciado se enteró de la noticia de su
padre, después de la llamada de su hermana, mientras colaborada en la grabación
de un video musical de carácter benéfico. Una vida dura, un ejemplo de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario